top of page
Buscar

Por suerte los viejos no son un mercado tentador para las marcas


Por esos días estoy leyendo el libro “El método Kowalski” de Víctor Barajas, al que recomiendo, para los que quieran aprender sobre ventas, no está de más señalarlo. Apenas comenzado el libro, Alberto, el personaje que relata el libro hace mención y reflexión de agradecimiento a Pepe Mayor su mentor y lo describe como —Veterano y sabio vendedor jubilado. A decir verdad en ese momento seguí leyendo, no le di mucha trascendencia. Solo pensé si yo le había agradecido a mi mentor, y sí, cada vez que he podido le he agradecido.


No te desesperes ya llega lo más importante de este texto, por suerte los viejos no son un mercado tentador para las marcas.


Solo una relación más y el disparador de esto. El momento de la reflexión es ahora.

El sábado mi pareja, Celeste, me invitó a que viesemos una película que le habían recomendado sus amigas, “El Agente Topo”, un documental de Maite Alberdi. No la voy a spoilear, solo reflexionar desde el Marketing y comunicación.

Es una película brillante y mis sinceros agradecimientos por poner ese relato de vida en la pantalla.


Esta reflexión comienza con palabras de la directora en una entrevista —Es terrible que aumente la expectativa de vida y no el deseo de vivir— Maite Alberdi.


En esta exquisita Película Documental que comenzó con una idea y se fue transformando por la realidad que viven hoy muchos de los abuelos; la película se filmó en Chile, pero es algo que pasa en todo el mundo.


Porque podría decirte que acá en Argentina o en otros países con severas dificultades socioeconómicas, es mayor. Pero no es así porque donde está la falla es en lo humano, estamos detrás de la zanahoria en nuestra vida productiva, nos olvidamos las dos cosas más importantes.


La primera dedicarles tiempo a nuestros adultos mayores en general y en particular a nuestros padres y abuelos.

Lo segundo es muy probable que nosotros estemos en ese lugar en algún momento, veteranos y jubilados.


Ellos necesitan y desean, respeto, cariño, una llamada telefónica, no tan esporádica, ser escuchados contarnos por enésima vez la misma historia, que los veamos a los ojos y nos animemos a decirles cuanto los respetamos y queremos. Al menos esto es lo que desearía yo cuando sea viejo.

Hoy está de moda en las marcas incluir vida sana y reducción de la huella de Co2. Está muy bien que así sea, pero van todas van detrás de la ola y claramente es así porque genera un alto ROI.

Si una empresa me consultara hoy le diría: ¡Hay que hacer marketing con los viejos! Pero NO para vender más, solo para ser más humanos. La empresa seguirá ganando o perdiendo dependiendo de su realidad. Es solo porque es lo correcto.

Si ha tenido algo para aprender esta pandemia COVID, fue la ayuda de los más jóvenes a las personas mayores.

Las marcas, son solo eso: marcas. Y a veces son el paraguas protector de las personas.


Es verdad que aumenta la expectativa de vida y que aumente el deseo de vivir. Por suerte los adultos mayores son un excelente mercado para las marcas dirigidas por hijos y nietos.

32 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page